ÉRASE UNA VEZ…

El joven Oru disfruta de manera despreocupada de su labor en el campo, junto a sus compañeros. En la villa parecían muy lejanas las PREOCUPACIONES de algunos de los aldeanos por la llegada de una posible tormenta, algo que ocurrió en la aldea en un remoto PASADO, y que fue una catástrofe. Pero había habitantes que continuaban preocupados a pesar de los cientos de años que habían transcurrido, y a los que les parecía una osadía la actitud de Oru, “¿cómo era posible que no se preocupase del bienestar del pueblo? ¿Cómo era tan frío ante la PREOCUPACIÓN de los demás?”. Indignados ante su actitud, un grupo de aldeanos fue a recriminárselo. Al frente, el cascarrabias Erre:

– ¡Oru! ¿Crees que con ese simple sistema de drenaje se acaba el problema? ¡No tienes ninguna consideración para con tu pueblo! ¡¿Qué haremos si no es suficiente para resolver los efectos de la tormenta?!

A lo que Oru contestó:

– Amigos, ¿aún estáis PREOCUPADOS por ese asunto?

– ¿Cómo no hacerlo? Recuerda que hace 200 años…

– ¿Hace 200 años? ¿Por qué os preocupáis por algo que ya ocurrió?

– ¡Precisamente nos preocupamos porque ocurrió!

– Pero amigos, ¿no creéis que vivir con MIEDO y PREOCUPACIÓN por algo que puede o no ocurrir de nuevo no nos conduce a ninguna solución? ¿Y si nunca ocurre?

– ¡¿Y si ocurre?!

– Para eso hemos inventado el sistema de drenaje.

– ¡¿Y si no es suficiente?! ¡¿Y si…?!

– ¿Y si la lluvia comienza a caer de abajo hacia arriba? ¿Y si el cielo se cae sobre nuestras cabezas? Daos cuenta de que vivir en supuestos es vivir en algo que no es real, pues de lo único de lo que podemos estar seguros es de lo que podemos vivir en este instante, del momento PRESENTE. Vivir preocupados por lo que ya pasó o por lo que puede pasar no es vivir, es sobrevivir.

– ¡¿Entonces, nos quedamos cruzados de brazos ESPERANDO nuestra destrucción?!

– ¿Y no crees que es mejor dejar de esperar nada para que empecemos a DISFRUTAR de todo lo que nos rodea AHORA? Ya hemos hecho todo lo que está en nuestras manos para OCUPARNOS del problema que tuvieron nuestros antepasados. Si, al final, llegan esas tormentas, AFRONTAREMOS y nos OCUPAREMOS de ese obstáculo entre todos en ESE MOMENTO. Hacerlo de otro modo sería entrar en un sinfín de supuestos y posibilidades que nos llevarían a tomar decisiones impulsados por nuestro MIEDO, ¿no crees?

El testarudo Erre no alcanza a comprender las palabras de Oru y siente que es una persona egoísta que prefiere huir de las preocupaciones de su villa. Así que vuelve a casa convencido de que hay algo que tiene que hacer para que no se repita en el FUTURO lo que ocurrió en el PASADO.

Mientras tanto Oru, ante la atenta mirada de Erre, vuelve felizmente a sus quehaceres, viviendo y disfrutando de lo que hace. DESPREOCUPADO y viviendo de instante en instante, en el PRESENTE. 

Vivir el Presente no es igual a vivir desorganizado. Hacer lo que Oru, el personaje del cuento, es lo más sano: OCUPARNOS en vivir nuestro Presente para poder DESPREOCUPARNOS del Pasado y del Futuro.

 

<<Extraído del libro "Guía Confrontación: tú no eres TÚ", de la Escuela Motivacional-Coaching Pop, escrito por Daniel Piñero y Miguel Ángel Díaz>>

+Cuento relacionado:

1.- “Érase una vez… el Poder de la Conciencia“

2.- “Érase una vez… la Eternidad del Todo“

3.- “Érase una vez… Preocupar, Ocupar y Despreocupar“