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La “necesidad de un cambio” para “salir” adelante
- 13 abril, 2018
- Posted by: CoachingPOP
- Category: Reflexiones de confrontación
Cuando nos sentimos hastiados y dubitativos y no sabemos qué hacer y qué elecciones tomar en nuestra vida acabamos estancados en un estado de incertidumbre, que oscila entre la preocupación e inseguridad constante hasta estados depresivos y de apatía. Cuando la persona está en ese estado, necesita recuperar parte de su energía positiva para contrarrestar la negativa que tiene arraigada, y poder “estabilizarse momentáneamente”.
Algunas herramientas para producir ese momentáneo cambio son los refuerzos positivos enfocados en la motivación y creencias de que “soy capaz” y “todo es posible”, unidos a forjar un sistema de creencias basado en la identificación de determinados valores que produzca percibirse y sentirse “mejor” y “válido” como persona. En definitiva, construir una personalidad distinta a la que teníamos en cuanto al concepto que se tiene de uno mismo y de la vida, para sentirse lo opuesto a lo que nos provoca esa energía negativa, transformandola en energía positiva (+).
Es decir, utilizar la Inteligencia Emocional para contrarrestar una serie de creencias por otras. Esto es algo muy útil para poder “estabilizarnos” y poder afrontar nuestra vida desde un estado de menor somatización nerviosa (menos estrés y ansiedad).
¿Pero qué ocurre si la persona no es consciente de este proceso? Es decir, que es algo momentáneo, como cuando nos tomamos una pastilla para la fiebre a sabiendas de que no estaremos siempre tomando esa pastilla, sino que lo hacemos para “equilibrarnos”.
Es aquí donde radica el punto de inflexión y distorsión…
El individuo, desde esa identificación y creencia, cambiará el sentirse menospreciado, con desgana y ansiedad por sentirse orgulloso, válido y con un poder sobre sí mismo que le hará sentirse eufórico. Euforia que interpretará como felicidad, sin ser consciente de que es también un desequilibrio, un estrés solo que desde lo positivo, que a la larga se transformará nuevamente en estrés corporal y mental.
Si la persona lleva mucho tiempo en estados de nerviosismo, estrés o ansiedad, su cuerpo se habrá “acostumbrado” a tener esa somatización física y estado emocional, catalogándola como “lo normal” en sí mismo. Es decir, habrá creído que ese es su estado real y verdadero. Es por ello que, cuando el individuo equilibre esa descompensación, sentirá una tranquilidad desconocida para éste. Tan desconocida que su propio sistema de creencias la interpretará como vacío, lo que le llevará a experimentar una incertidumbre, pues no está acostumbrado a estar en sí mismo. Su Inteligencia Emocional le pedirá más, pues se ha convertido en un dependiente de estados emocionales descompensados.
Y ahora creerá que está descubriendo su «poder oculto» sin ser consciente que lo que está haciendo es simplemente compensar su negatividad con positividad.
Una compensación que nada tiene que ver con el reconocimiento interno y verdadera autoestima de Ser, con aceptación interna y externa.
Si la persona es consciente de que ese proceso es algo momentáneo, podrá “equilibrarse” lo suficiente para posteriormente poder abordar aspectos de sí mismo y de su vida que no podía tratar por si identificación negativa.
Pero si simplemente se cambia la identificación negativa por la positiva, creyendo que se es ésta última como rechazo a la primera, se seguirá haciendo lo mismo: dar la espalda a nuestra vida y momento presente. Se necesitará un cambio para no tener que Ser Yo y aceptar lo que me da miedo comprender. Y se creará un enganche a necesitar ese cambio, teniendo que tener una “guía de cómo vivir mi vida” para volver a sentirse con adrenalina y euforia que me haga sentirse “uno mismo”. Porque es más sencillo resistir con refuerzos positivos para ocultar mi miedo que comprenderlo, según cree mi sistema de creencias.
Irónico, ¿verdad?
Miedo a vivir Siendo uno mismo en nuestra vida.
No somos lo positivo ni lo negativo, somos ambos, pues todo se da en nosotros. La clave del fluir es permitirse todos los estados, comprendiendo que no se es lo que se siente ni se piensa, ni lo que se hace o se consigue. Porque la autoestima interna no necesita demostrar ni demostrarse nada para estar ya pleno en sí mismo y con la vida. Porque no se intenta cambiar el mundo, se VIVE en éste, Siendo. Eso es ACEPTAR.
Simplemente se comprende que los estados emocionales son momentáneos. Trascender este Entendimiento nos hace aceptar nuestra vida porque nos aceptamos a nosotros mismos, nos Dejamos Ser.
Al rechazar e identificarnos con uno de estos polos lo único que consigo es fomentar más la guerra interna y, por consiguiente, la externa (ya sea de forma expresa o contenida, con un juicio interno y menosprecio a lo que no sea “válido” y “justo” según mi criterio). Me identifico y creo la necesidad de estar en estados de apatía y depresivos y de recibir ayuda, o con estados de euforia y sacrificio, entregando mi vida a mis creencias (ya sea en forma de objetivos que me hagan sentirme reconocido u orgulloso de mí, ayudar o de demostrar de lo que soy capaz), sin darme cuenta de que lo hago porque creo que tengo que formar lo que SOY como contraposición a Ser Yo y Estar en mí.
Interfiero en el proceso de los demás porque alivia mi propio proceso, mi miedo. Porque mi miedo es el que crea los valores (para sentirse más) y el grado de importancia que le damos a las cosas, así como los objetivos a alcanzar. Es dar la espalda a la comprensión, una No-aceptación en guerra que crea una mayor dependencia hacia lo positivo y un mayor rechazo a lo negativo, y viceversa (dependiendo y defendiendo de nuestro sistema de creencias y de si nos identificamos más con ser + o ser – en nuestra falsa autoestima basada en la seguridad y reconocimiento externo.
Recuerda, DEJA DE CREER lo que crees que tienes que SER, HACER y TENER en la vida. No tienes que CAMBIAR nada, sólo tienes que permitirte SER, sin más.
SER no entiende de valores ni importancias, ni busca conseguir nada, porque simplemente YA ES.
Author: AdminPop
8 comentarios
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Ay…los debes… 🙂
Buen artículo chicos. Una profunda aceptación de uno mismo, de los que nos rodean, incluyendo animales, diría yo, y de la Vida.
Y aviso a navegantes, aceptar no significa resignarse o que nos de todo igual.
Besos.
Muchas gracias Mar por dejar tus impresiones! Animales incluidos, aunque con sutiles diferencias.
Y genial el aclarar que ACEPTAR no es RESISGNAR, sino precisamente VIVIR SIENDO nosotros! Besos! 😉
Nuestra mente coje la costumbre a no querer salir de esa área de confort, a no moverse. Dejarnos fluir es aceptar los cambios.
Exactamente, la mente se ha acostumbrado a sentirse «seguro» por estar en una zona de confort (por tener factores externos «bajo control»), porque realmente detrás de eso hay miedo al error, a sentirme culpable, a no cumplir espectativas… En definitiva, a no permitirme VIVIR y SER yo mismo, porque habré creíado en mi infancia que eso no es suficiente. Fluir es reconciliarnos con ese niñ@ del pasado y ahora dejarnos llevar, sin más! Esa es la verdadera SEGURIDAD, la que se tiene en uno mism@, no la externa que mencionabamos al principio. Esa es la verdadera autoestima, la SEGURIDAD y RECONOCIMIENTO en uno mismo, sin más, que te permite VIVIR libremente.
Muchas gracias por comentar! Esperamos seguir viéndote!
Genialesss!!!! Me encantó. No tiene sentido elevar tu autoestima cuando sabes realmente quien eres.
Felicidades y un abrazo!!!
Gracias!!! Exactamente! La autoestima es algo innato, simplemente que se nos ha olvidado que está ya en nosotros y no fuera!
Gracias por comentar! Esperamos seguir leyéndote por aqui!
El estado ideal sería la tranquilidad entonces, no la felicidad como muchos creen. La tranquilidad, el equilibrio.
No existe el Estado ideal. Simplemente el permitir estar en el estado en el que se está. Esa es la clave para el equilibrio. Permitirse vivir en todos los estados comprendiendo el porqué de cada uno de ellos. Eso te hace soltar la emoción sin anclarla en tu vida presente. Vives los estados sin retener ni rechazar o anhelar ninguno.
Gracias por dejar tu reflexión y pregunta!